Abstract
El cambio generacional ha marcado una evolución cultural y deportiva; tanto para hijos como padres. Estos cambios ya no solo se ven reflejados en las relaciones de tipo cariño y dependencia sino en las asociadas a la actividad física que deben realizar los niños en etapa de crecimiento. Esta transición de generaciones ha dejado la parte lúdica solo a niños en etapas de primera infancia mientras que actividades físicas de tipo competitivo ahora son exigidas por padres de familia para todo niño en etapa subsecuente de infancia entre 6 a 11 años. Exigidas en el contexto de frustraciones pendientes de los padres que al no haber podido ser deportistas de élite manifiestan su fracaso al demandar resultados ya inmediatos a niños que en la mayoría de ocasiones no conocen ni el contexto del deporte en el que se solicita su perfecto desempeño.